Existen ciudades como Cádiz que viven los Carnavales de manera intensa, así como se va trasladando esto a otras ciudades españolas. Hablamos de una fiesta de disfraces que suele gustar a niños y adultos, aunque, eso sí, los padres deben controlar a los niños, pues estos deben ir vestidos para sorprender, pero sin que se den situaciones incómodas.
Red de Alerta de Productos de Consumo
Este es un punto importante y son los controles realizados por la Inspección de Consumo de cada una de las Comunidades Autónomas en todos los establecimientos en los que se venden esta clase de artículos, como podemos en los clásicos bazares chinos, que es donde más se venden este tipo de prendas a los niños.
Cada una de las consejerías ponen en marcha esta clase de controles, los cuales recogen muestras de distintos artículos para analizarlos en los laboratorios que lo que hacen es medir la seguridad que tienen los materiales y en su propia confección.
En el caso de que estas inspecciones lleguen a encontrar que los artículos son un riesgo para las personas, entran en una Red de Alerta de productos de Consumo. Hablamos de un sistema en el que se intercambia de manera rápida a nivel europeo.
Plan de Inspección 2020
Si hay artículos que no cumplen, entran en ese registro, al que tendrán acceso autoridades que van desde lo local a lo europeo.
¿Qué se recomienda a la hora de adquirir un disfraz?
Desde las autoridades, se hacen algunas recomendaciones que deben tenerse en cuenta para comprar un disfraz de adquirir disfraces, en especial si son artículos para niños.
Algo que consideramos básico es leer la etiqueta del producto, la cual debe siempre figurar en castellano.
Aquí, como defienden desde los especialistas en el terreno de los disfraces de Disfrazarte Shop, siempre hay que mostrar en el artículo la marca CE, la cual nos indica que se cumple con las normas europeas en cuanto a seguridad.
Hay que tener atención con el sello chino CE (China Export), el cual no se distingue apenas del europeo, salvo por la escasez de espacio entre las dos letras y que, como podéis imaginar se creo para la confusión y así pasar por el de la Unión Europea.
En cuanto a las máscaras, hay que comprobar si tienen los suficientes agujeros para que se pueda respirar y así hacer posible la ventilación. No olvidemos que en los maquillajes se hace importante la comprobación de los componentes y su fecha de caducidad de cara a poder evitar las alergias que puedan producirse.
A nivel de maquillaje, hay que comprobar que, tanto los componentes como la fecha de caducidad estén en regla para que así no se puedan producir reacciones de carácter alérgico.
En cuanto a las lentillas decorativas se deben comprar solo en las tiendas que tengan personal profesional debidamente cualificado.
Las piezas pequeñas que se puedan separar del disfraz no están muy indicadas para los trajes infantiles por los enormes riesgos que supone la ingesta de los mismos. De la misma forma tiene que huirse de los tejidos de carácter inflamable y de las bordes que sean cortantes.
Otro tema por ejemplo que suele causar bastante polémica son los cordones cuando se encuentran en la zona del cuello, pues no son adecuados para los disfraces para niños, ya que existe la posibilidad de poder estrangularse en los más pequeños. En el caso de que haya cordones en el disfraz, tendrá que estar fijo y que no se puedan soltar.
Las etiquetas tendrán que dejar claro el nombre y domicilio del fabricante del producto y si es fruto de la importación, pues de la misma manera el nombre y domicilio, su composición y las pertinentes recomendaciones para la conservación y el lavado.
Desde consumo recomiendan que se conserve siempre el ticket de la compra, pues gracias a él se podrá hacer la pertinente reclamación, devolución o el mismo cambio del producto que se adquiera.
Siempre es bueno informarse por la política de devoluciones existente, que si vamos a Internet, incluirá el derecho de desistimiento. Así vamos a poder cancelar el contrato por un plazo mínimo de 14 días naturales desde que se reciba el producto, sin que haya que reseñar algún motivo y sin penalizaciones.
Otra de las garantías más potentes desde la venta es comprar los disfraces en las tiendas que se adhieran al Sistema Arbitral de Consumo, pues así quedará garantizada la resolución de los conflictos que se produzcan.
Las tiendas que se adhieran a este tipo de sistema tendrán que tener hojas de reclamación a disposición de la clientela.