España es un país en el que existe mucho terreno que todavía sigue siendo rústico. Durante las últimas décadas, la sensación general es la de que se ha construido mucho, que las ciudades y los pueblos son más grandes y que el campo, en resumidas cuentas, ha perdido terreno. Pero lo cierto es que sigue habiendo mucho suelo rústico en el que hay fincas de todo tipo. Es algo que ocurre en prácticamente toda España y que va a seguir formando parte de nuestro paisaje. Y es que el nuestro es un país en el que las fincas conforman un paisaje conocido para todos y todas.
Por tanto, son muchas las personas que normalmente visitan fincas, ya sea porque son de su propiedad o porque tienen algún amigo o amiga que celebra algún cumpleaños o fiesta en un espacio como del que estamos hablando. Por lo que destaca un espacio como este es por la tranquilidad que proporciona, ya que su ubicación, muchas veces lejos de los grandes núcleos de población, nos ofrece una intimidad y un disfrute que no se pueden tener en lugares en los que la densidad de población sea más grande. Por eso hay tantas personas que se encuentran muy enamoradas de espacios como los de las fincas.
Cuando se tiene una finca, eso sí, hay que tener en cuenta una serie de cuestiones que nos van a hacer falta para garantizar tanto la seguridad como la imagen que proporciona la finca. Y es que no es para menos. Vamos a hacer un repaso sobre todas esas cosas que son necesarias para hacer que una propiedad rústica como de la que estamos hablando esté bien protegida y ofrezca todo lo que necesitamos para disfrutar de esos días de ocio que decidimos pasar allí y construir recuerdos que van a terminar siendo inolvidables tanto para nosotros como para las personas que nos van a acompañar.
Alarma de seguridad conectada con la Policía
Es una de las grandes necesidades que tenemos cuando disponemos de una propiedad de este tipo. Ya sabéis de sobra que no pasamos tanto tiempo allí como normalmente podemos pasar en casa y que eso convierte a la propiedad en ser susceptible de atraco por parte de ladrones. Por tanto, tener una alarma es idóneo tanto para prevenir el robo como para, en caso de que se termine produciendo, que sea mucho más fácil detener e identificar las personas que lo han acometido. Ni que decir tiene que la seguridad es uno de los aspectos que más tenemos que valorar en la sociedad moderna y que la tranquilidad que eso nos va a proporcionar es fundamental para tener una determinada calidad de vida.
Es evidente que, por regla general, no se va a disponer de grandes cosas de valor en una finca si no solemos estar allí todos los días, pero puede ser útil la alarma para prevenir casos ya no de robo, sino de ocupación. Este es uno de los grandes problemas con los que contamos a día de hoy en España y que más intranquilidad ocasiona a los propietarios de viviendas y edificios en general. Por tanto, es conveniente mantener cierta seguridad al respecto de este tema. En caso de que no sea así, nos podemos encontrar con sorpresas nada agradables y que, además, no van a resolverse de un día para otro.
Cierres residenciales
Es otra de las grandes necesidades que tenemos cuando disponemos de una parcela. Estamos seguros de que todas las que habéis visto y todas a las que habéis ido alguna vez tenían algún cierre residencial o incluso agrícola, si la propiedad también cuenta con terrenos de cultivo. Es un elemento necesario para hacer posible la seguridad de la propiedad y que también es usado para delimitarla perimetralmente. Desde luego, no cabe la menor duda de que es una de las cuestiones que más personas tiene en consideración y que puede eliminarnos del camino muchos más problemas de los que creemos.
Los cierres residenciales se han convertido en una gran necesidad para todas aquellas personas que disponen de una finca rústica. Pero lo curioso es que las personas propietarias no las usan solamente para delimitar la finca, sino también para delimitar alguna piscina que se encuentra en el interior o incluso para hacer lo propio con un jardín, que es otra de las cosas que vienen siendo habituales de un tiempo a esta parte. De acuerdo con lo que nos comunican desde Spadico, especializados en la distribución de cierres residenciales de todo tipo para los usos que os hemos comentado, la delimitación de piscinas o jardines es casi tan importante como la de la finca completa para buena parte de los propietarios.
Cerraduras de primera calidad
Otro elemento indispensable. Toda finca suele tener varias construcciones en su interior. Mucha gente construye una vivienda y, como es lógico, dentro tendrá equipamiento propio como el que puede tener en su hogar: camas, mesas, sillas, un frigorífico… Todo eso, sumado, implica una gran cantidad de dinero. Si nos lo robaran, tendríamos que asumir el gran coste que supondría volver a comprar lo que tenemos, si es que no lo tenemos asegurado. Y claro, es evidente que esto nos supone un problema de una gravedad considerable y que necesitamos que no se produzca. La cerradura a esa vivienda es, por tanto, imprescindible.
Pero es que la vivienda no es la única propiedad que nos podemos encontrar en un espacio como del que estamos hablando. Muchas personas también levantan segundos edificios, como lo pueden ser cocheras. Aquí todavía juega una mayor importancia el hecho de tener una cerradura si estamos usando el espacio para guardar un coche, aunque sea muy antiguo. Un robo puede ser igual de doloroso aunque lo que se haya sustraído no sea de una importancia económica brutal. También hay objetos cuyo valor es más bien sentimental. Y se puede evitar una situación así con una cerradura que sea de calidad y que impida la entrada a los ladrones.
La compraventa de fincas rústicas continúa creciendo a buen ritmo
Hay mucha gente que compra o que vende fincas rústicas en España. Es algo que se puede comprobar si atendemos a los datos que nos está dejando la compraventa de superficies como de las que estamos hablando a través de noticias como la que os enlazamos a continuación de Agronews Comunitat Valenciana, que afirma que, en el año 2021, se vendieron un total de 157.350 fincas rústicas en el interior de nuestras fronteras. El dato era sensiblemente superior al del año anterior, en concreto en un 30%, quizá producido por el hecho de que 2020 fue un año marcado por la pandemia.
Las provincias españolas que más fincas rústicas tenían en venta en abril de 2021 según este artículo que os enlazamos y que proviene de la página web de Fincalista eran las que componen las Islas Baleares. Y, en un segundo escalafón, podemos encontrar provincias andaluzas como lo son Málaga, Granada o Almería, seguidas de una Alicante en la que es un verdadero lujo poder contar con superficies como de las que os estamos hablando.
La misma noticia también comenta cuáles son las comunidades autónomas que disponen de más fincas. Castilla Y León es la que mejor parada sale en este sentido con un total de 63.300, mientras que Castilla – La Mancha ocupa la segunda posición con algo más de 41.000. El tercer escalón del podio es para una Comunidad Valenciana que supera las 38.000 unidades. Como veis, las que más tienen suelen ser comunidades grandes, que cuentan con más espacio para esto. Falta Andalucía, pero es verdad que no hay tantas fincas allí porque las que existen son más grandes y tienen a los mismos dueños (son más comunes los latifundios en esta zona).
Nos parece completamente lógico que la compraventa de terrenos como de los que estamos hablando esté tan a la orden del día.
- Por una parte, hay quien quiere vender este tipo de terrenos porque antiguamente pertenecían a otros miembros de su familia y no le van a dar el mismo uso que el que le daban ellos.
- Por otro lado, hay quien desea comprarlos porque cuenta con el dinero suficiente para efectuar la compra y quiere un espacio que le sirva de relajación, de lugar para disfrutar de sus momentos de ocio.
¿Cuántas personas de las que estáis leyendo este artículo desearíais tener una finca para poder disfrutar en ella de vuestros días de ocio? ¿Qué grado de felicidad os proporcionaría el hecho de poder invitar a familia y amigos a un terreno como este y disfrutar de su tranquilidad y de la amplitud que ese terreno garantiza? Estamos seguros de que, para muchos de vosotros y vosotras, esto implicaría una mejoría sustancial en vuestra calidad de vida. Y, como no podía ser de otra manera, nosotros solo os podemos recomendar cosas que vayan a mejorar vuestra existencia. Esta, a buen seguro, es una de ellas.