Los brackets de zafiro nacieron con el objetivo de alinear los dientes y reducir el impacto estético negativo que producía el clásico aparato metálico. En la actualidad estos brackets se han convertido en uno de los tratamientos ortodóncicos más demandados. Los brackets de zafiro son idóneos para aquellas personas que valoran la estética, ya que son muy discretos y a media distancia no se ven. El zafiro se adhiere mejor al diente que otros tipos de ortodoncia como la porcelana o el plástico, por lo que es más difícil que se despegue.
Estos aparatos son transparentes como el cristal, y al dejar pasar la luz, se difuminan y mantienen el color del diente. Además, todas las ortodoncias realizadas con brackets funcionan de la misma manera y el sistema de desplazamiento de las piezas dentales es el mismo. La colocación de los brackets de zafiro se realiza en la clínica dental y el ortodoncista evaluará la salud bucodental del paciente.
Los brackets de zafiro pueden corregir cualquier tipo de problema relacionado con el alineamiento o las mismas maloclusiones dentales que los brackets metálicos: mordida abierta, diastemas, sobremordida, mordida cruzada, etc. Pero se diferencian en los materiales, ya que son más discretos que los brackets metálicos.
Desde el Consejo General de Dentistas informan que «la mejor forma para saber si tus dientes necesitan un tratamiento ortodóncico es acudir a una clínica dental y someterse a un diagnóstico por parte del experto en este campo, el ortodoncista».
Las ortodoncias metálicas son más resistentes, pero el zafiro es más duradero que el resto de las ortodoncias que están fabricadas en zirconio o porcelana. Esta ortodoncia es más discreta porque el arco puede ser blanco y las ligaduras suelen ser blancas o transparentes. El zafiro es un material resistente, se adhiere muy fácilmente al diente y permanece intacto con el paso del tiempo.
Queríamos saber si los brackets de zafiro pierden el color, así que nos acercamos a la Clínica dental Clara Santos y estos especialistas en ortodoncia y en tratamientos avanzados nos informaron que el zafiro mantiene su color transparente durante todo el tratamiento y no se tiñe con la ingesta de ciertos alimentos como los frutos rojos o el vino tinto.
Es una ortodoncia muy atractiva, ya que estos brackets permanecen transparentes y sin posibilidad de pigmentarse o deformarse por los alimentos ingeridos. Es un tratamiento prácticamente invisible y no requiere ningún cuidado especial. Aunque es importante lavarse los dientes después de cada comida porque los brackets son unas piezas que favorecen la acumulación de comida a su alrededor.
Se recomienda utilizar hilo dental, enjuague bucal y un cepillo interproximal. Es fundamental eliminar cualquier resto de comida que pueda provocar la aparición de caries, enfermedad periodontal o mal aliento. El zafiro es un material muy resistente en dureza y en su color. Durante el tratamiento, el paciente puede continuar con su dieta habitual y tomar vino y café. Los brackets de zafiro no se tiñen con la ingesta de estos alimentos pero hay que tener especial cuidado cuando se tomen alimentos que puedan romperlos como los frutos secos, semillas, manzanas, bocadillos o alimentos pegajosos.
¿Cómo se coloca la ortodoncia de zafiro?
El tratamiento comienza con el diagnóstico de la dentadura del paciente. Para ello, el dentista deberá realizar radiografías para elegir el diagnóstico adecuado. Antes de colocar los brackets de zafiro es fundamental realizar una limpieza bucodental al paciente para eliminar el sarro y dejar la superficie dental más lisa. Después el ortodoncista coloca un adhesivo especial para poder fijar los brackets a las piezas dentales. Este adhesivo no produce ningún daño y se elimina una vez que termina el tratamiento.
La colocación de los brackets puede hacerse mediante un cementado directo, es decir, uno a uno. Pero también puede hacerse mediante un cementado indirecto, por lo que brackets son colocados en un molde y posteriormente se transfieren a la cavidad oral de una misma arcada a la vez. Por último, se introduce un alambre metálico (arco) a través de los brackets. A su vez, cada uno de estos brackets se une al arco con unas ligaduras.
La duración de este tratamiento de ortodoncia depende del tipo de problema que se quiere corregir. Si el paciente quiere solucionar un problema de apiñamiento, el tratamiento puede durar entre 6 y 18 meses. En cambio, en caso de problemas de mordida u oclusión, es probable que el tratamiento dure 24 meses. Este tratamiento es muy cómodo, modifica la posición de los dientes, previene patologías y mejora la estética.