El té, una bebida ancestral con un aroma y sabor cautivador, ha conquistado paladares a lo largo de la historia. Desde la tienda de té en Burgos, La Oruga Azul, explican que es un conjunto, “los sabores, aromas y tradiciones que hacen del mundo del té un lugar tan fascinante y diverso.”
Más allá de su deleite sensorial, el té esconde un tesoro de beneficios para la salud.
Beneficios
Sí, beber té todos los días puede ser bueno para la salud, siempre que se consuma con moderación y dentro de una dieta equilibrada. Diversos estudios científicos han demostrado que el té ofrece una variedad de beneficios, incluyendo:
- Mejora la salud cardiovascular: algunos tipos de té como el verde y negro tienen la capacidad de reducir el colesterol LDL y reducir el HDL. Lo que ayuda a reducir el riesgo de sufrir enfermedades que afectan al corazón.
- Previene el cáncer: concretamente el té verde tiene componentes como la catequinas que es antioxidante y lo más importante, anticancerígenas.
- Fortalece el sistema inmunológico: cualquier tipo de té tiene la capacidad de proteger al cuerpo de sufrir infecciones. Esto se debe a que son antioxidantes.
- Ayuda a perder peso: debido a que tiene propiedades que ayudan a aumentar la tasa metabólica a la vez que se pierde grasa. Sobre todo el té verde.
- Mejora la salud mental: ayuda a reducir el estrés y la ansiedad. Además, destaca porque ayuda a mejorar la concentración y la memoria.
- Protege la salud ósea: en este caso, el consumo de té oolong puede aumentar la densidad mineral ósea. De manera que reduce el riesgo de osteoporosis.
- Mejora la salud dental: previene la formación de placa y las caries.
Sin embargo, es importante tener en cuenta algunos aspectos:
- La cantidad: es importante consumir la cantidad apropiada. Se recomiendan entre 3 y 4 tazas de té al día. Un consumo excesivo tiene riesgos como la ansiedad o el insomnio.
- El tipo de té: ten en cuenta los componentes de cada té. Por ejemplo el té negro tiene teína lo que favorece la estimulación. En caso de no buscas eso, opta por otra clase de té como el verde o blanco.
- La calidad: cualquier alimento o bebida que consumas tiene que ser de calidad. Valóralo a la hora de escoger un té adecuado.
- Preparación: la preparación afecta los beneficios que aporta a la salud. Hay que prestar especial atención a la temperatura y tiempo de infusión.
Por todo ello, beber té todos los días es una forma saludable y sencilla de mejorar tu salud y bienestar. Sin embargo, es importante tener en cuenta que hacerlo en exceso puede tener riesgos. Todo es bueno en su justa medida. No obstante, ante cualquier duda, consulta con un médico.
Tipos de té
Té verde
Sin fermentar, con un sabor fresco y herbáceo. Rico en catequinas, que combaten el cáncer, estimulan el metabolismo y fortalecen el sistema inmunológico.
Otros beneficios:
- Previene el cáncer de mama, próstata y colon.
- Estimula el metabolismo y la pérdida de peso.
- Fortalece el sistema inmunológico y combate infecciones.
- Mejora la salud cardiovascular y reduce el colesterol.
- Protege el cerebro y la memoria.
- Regula el azúcar en sangre.
Un estudio publicado en el Journal of the National Cancer Institute encontró que el consumo regular de té verde se asoció con un menor riesgo de cáncer de mama. Además de un metanálisis de 17 estudios observó una reducción del 33% en el riesgo de cáncer de próstata en hombres que bebían té verde con regularidad.
Té negro
Fermentado completamente, con un sabor intenso y robusto. Contiene teoflavina, que protege el corazón, y polifenoles que mejoran la digestión. Destacar que además:
- Mejora la salud vascular y la presión arterial.
- Fortalece el sistema inmunológico.
- Estimula la función cerebral y la concentración.
- Ayuda a combatir la fatiga.
Té blanco
Mínimamente procesado, con un sabor delicado y floral. Alto en antioxidantes, ideal para proteger la piel y prevenir el envejecimiento.
- Protege la piel del daño solar y el envejecimiento prematuro.
- Fortalece el sistema inmunológico.
- Mejora la salud dental y previene las caries.
- Reduce el estrés y la ansiedad.
- Ayuda a mejorar la calidad del sueño.
Té oolong
Parcialmente fermentado, con un sabor complejo y afrutado. Reduce el colesterol y ayuda a controlar el azúcar en sangre. Esto no es todo, también:
- Reduce el colesterol y los triglicéridos.
- Ayuda a controlar el azúcar en sangre.
- Previene la osteoporosis y fortalece los huesos.
- Reduce el riesgo de enfermedades dentales.
- Favorece la digestión y la salud intestinal.
Té rojo (Pu-erh)
Post-fermentado, con un sabor terroso y ahumado. Propiedades antimicrobianas y digestivas que además:
- Ayuda a eliminar toxinas del cuerpo.
- Reduce el colesterol y los triglicéridos.
- Favorece la digestión y la salud intestinal.
- Protege el hígado y ayuda a desintoxicarlo.
- Reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Aspectos a tener en cuenta al consumir té
Para aprovechar al máximo sus propiedades, es importante tener en cuenta algunos aspectos clave.
Tipo de té
- Té verde: Rico en catequinas, con propiedades antioxidantes y anticancerígenas.
- Té negro: Contiene teoflavina, beneficiosa para la salud cardiovascular.
- Té blanco: Menos procesado, alto en antioxidantes y con un sabor delicado.
- Té oolong: Reduce el colesterol y ayuda a controlar el azúcar en sangre.
- Té rojo (Pu-erh): Propiedades antimicrobianas y digestivas.
Calidad del té
- Busca hojas enteras y de origen conocido.
- Evita tés con saborizantes artificiales o azúcares añadidos.
- Opta por tés ecológicos o de producción sostenible.
Preparación
- Sigue las instrucciones de temperatura y tiempo de infusión para cada tipo de té.
- Usa agua de calidad, preferiblemente filtrada o mineral.
- Precalienta la tetera o taza.
- Evita la sobreinfusión, ya que puede amargar el té.
Cantidad
- Se recomienda consumir de 3 a 4 tazas de té al día.
- Un consumo excesivo puede tener efectos negativos como insomnio, ansiedad o irritabilidad.
- Si eres sensible o te afecta la cafeína tenlo en cuenta a la hora de tomar té. Escoge aquellos que tienen menor cantidad de teína.
Momento ideal
- Disfruta del momento de consumir té, independientemente de la hora del día.
- El té verde es estimulante por lo que puede ser una buena opción para las mañanas.
- El té negro por ejemplo, suele consumirse después de la hora de la comida.
- Para un buen descanso por la noche son más apropiadas las infusiones de hierbas y rooibos.
Combinaciones
- Experimenta con diferentes sabores y aromas.
- Agrega leche, miel o stevia al gusto.
- Prueba el té frío o con frutas y especias.
Interacciones
- Consulta con un profesional de la salud si tienes alguna condición médica o estás tomando medicamentos.
- Algunos tipos de té pueden interactuar con ciertos medicamentos.
Almacenamiento
- Guarda el té en un recipiente hermético en un lugar fresco y seco.
- Evita la luz solar directa y la humedad.
Sostenibilidad
- Opta por marcas de té que se comprometan con la sostenibilidad y el comercio justo.
- Reduce el consumo de envases de plástico y elige alternativas ecológicas.
Disfruta del ritual
- Convierte el consumo de té en un momento de placer y relajación.
- Dedica tiempo a preparar el té y disfrutar de su aroma y sabor.
- Comparte el té con amigos y familiares.
Recomendaciones
Experimentar con diferentes tipos de té:
- Explorar la diversidad: desde el clásico té verde con su sabor fresco y herbáceo hasta el reconfortante té de manzanilla con sus notas florales, cada tipo de té ofrece una experiencia única para el paladar.
- Descubrir nuevos sabores: no consumas siempre el mismo. Normalmente a quien le gusta un té le gustan otros. Por ello, para aromas intensos el té negro; por aroma floral y sabor delicado el té blanco; si eres más de sabores frutales, el té oolong es una buena opción.
- Encontrar tus favoritos: para encontrar el que más te guste es necesario tomar distintos para una buena elección. Es la manera de encontrar el que más se adapta a ti, aunque también dependerá del momento.
Personalizar tu taza de té:
- Añadir ingredientes: puedes mejorar el té con algunos ingredientes. Por ejemplo, la leche mejora la textura; la piel lo endulza y la stevia lo vuelve más saludable.
- Explorar especias e hierbas: experimenta con canela, jengibre, menta fresca o cardamomo para crear combinaciones aromáticas y deliciosas.
- Ajustar la temperatura: juega con la temperatura del agua para obtener diferentes resultados en el sabor y aroma del té.
Explorar diferentes formas de preparación:
- Té frío: una opción refrescante para los días calurosos, ideal para disfrutar en verano o como alternativa al café helado.
- Té con frutas: agrega rodajas de limón, naranja, fresas o frutos rojos para crear infusiones frutales y deliciosas.
- Té con especias: incorpora canela, jengibre, clavo o pimienta negra para obtener un sabor más intenso y especiado.
Compartir el té como experiencia social:
- Conectar con amigos y familiares: una taza de té se puede servir en cualquier momento. Es un perfecto acompañante de charlas y conversaciones entre amigos y familiares.
- Compartir historias y emociones: suele ser un espacio que genera conversación y conexión.
- Fortalecer vínculos: sirve para unir a las personas a través de una experiencia sensorial. Hay vida más allá de las cervezas y los cafés.