Después de un año y medio caracterizado por problemas de todo tipo que han sido derivados de una pandemia que nadie se esperaba, la normalidad parece estar volviendo a nuestros pueblos y ciudades, a nuestras calles y plazas, a nuestros hogares y lugares de trabajo. No ha sido fácil llegar hasta aquí, pero la verdad es que podemos considerar que hemos tenido suerte de que una vacuna haya llegado hasta nuestro centro de salud más cercano para evitarnos tener que padecer las peores consecuencias del contagio por coronavirus… y para evitar nuevos confinamientos y restricciones.
Como consecuencia de todo lo que os estamos diciendo, los eventos están volviendo a ser los que eran. Durante el año 2020, fueron paralizadas las bodas, los conciertos, las fiestas… y los deportes pasaron a practicarse sin público. Teniendo en cuenta las dificultades que todo eso ha ocasionado entre la gente que es propietaria de un negocio, no nos cabe la menor duda que la vuelta a la normalidad ha sido todo un balón de oxígeno para la economía española y para la del resto de países del mundo. Lo cierto es que todos y todas estamos suspirando de alivio después de las últimas noticias que nos deja la pandemia.
Una noticia publicada en la página web de El Periódico indicaba que, en septiembre de este año, España estaba rozando la normalidad que le había sido arrebatada por parte del COVID-19. Y ese es uno de los máximos motivos de celebración que hemos tenido en el interior de nuestras fronteras de un tiempo a esta parte. Ni que decir tiene que, a partir de ahora, toca recuperar el tiempo perdido y volver a demostrarle al mundo el carácter alegre y feliz del que solemos hacer gala en este país. ¡Es hora de disfrutar!
Otra información, en este caso publicada en el portal web de Antena 3, informaba de que las bodas estaban volviendo a celebrarse en España después del parón ocasionado por el coronavirus. El resultado era que este sector se estaba colapsando, lo que hacía necesaria una mayor organización en lo relativo a esta cuestión. Seguro que lo habéis notado: el número de compromisos que tenemos en lo relacionado con este asunto ha aumentado. Hay gente que hasta tiene tres y cuatro bodas en un año ahora. Es lógico: las del año pasado se celebran próximamente y las de este año también tienen que salir adelante.
Que haya tantas bodas y eventos durante este año está haciendo que sean muchas las personas que necesiten una renovación de su vestuario. Es algo que nos confirman desde La Pepa Alicante. Sus trabajadores y trabajadoras indican que, durante todo este año 2021, se ha producido un aumento de las ventas de vestidos y ropa de fiesta en general. No cabe la menor duda de que eso está relacionado de una manera directa con todo lo que tiene que ver con el aumento de eventos formales a los que debemos acudir.
Volviendo a la normalidad en todos los sentidos
Por suerte, estamos recuperando algunas de las cuestiones habituales de nuestro día a día previo a la pandemia. Teníamos muchas ganas de que esto fuera así y la verdad es que la mayoría de la gente de nuestro entorno también. No es para menos, dadas las dificultades que nos hemos visto obligados y obligadas a asumir como consecuencia de una situación sanitaria a la que casi nadie se había enfrentado en ningún momento de su vida. Como decíamos antes, es hora de recuperar el tiempo perdido y empezar de nuevo a disfrutar de nuestra vida.
Para las personas que son protagonistas en los eventos de los que estamos hablando, es lógico que suponga una verdadera sensación de alivio el poder ver que, al final, han podido organizarlo y que lo han podido hacer con toda la gente de su confianza a su alrededor. Es cierto que la espera no ha sido fácil, pero no cabe la menor duda de que se ha visto compensada con una celebración que, a buen seguro, será por todo lo alto. Desde luego, lo que está claro es que ha llegado la hora de sentir las alegrías que nos tocaba vivir.
Estamos seguros de que todavía en 2022 seguirá habiendo eventos aplazados de este año y del anterior que por fin verán la luz. Es una noticia excelente que así sea. Lo verdaderamente importante es que sigamos aquí para celebrar todo eso que nos ha quedado en el aire. Y hay que aprender a valorar este tipo de cosas. Ni que decir tiene que, gracias a eso, podemos decir que somos felices y que las personas que se encuentran a nuestro alrededor también lo son.